martes, 9 de octubre de 2012



Exorcismo

Desamparado sentimiento mío,
es hora de andar solo
midiendo el vacío con tu sexto sentido.
Libérate de mí. Busca una bahía, échate
a volar en un cielo ardido, pero
no anides nunca en otro ser vencido.
Líbrame de ti. Ya no puedo mantenerte vivo.
Algo ha sucedido, algo distinto...
Será que ya no espero
ni la luz ni el día
con ilusión de estreno.
Me atren la noche y el sueño
ausentes de todo pensamiento.
Se me hace
que es la breve sombra de la noche
una selva segura para animal herido.
Y el despertar, la renovada flecha
que encuentra su destino en mí,
desamparado sentimiento mío...



Letargo 

 Son tan semejantes a otros
los días que vivo
que ya no me conozco. Esta falta de asombro
se parece a la nada.
Busco en un verso escrito rastros de mis pasos
o de aquella esperanza de la que supe
     ser nido...
Añoro mi espacio interior y las huellas
de una senda
para andar de a dos.
Es solitario y angosto el camino
  y los días
tan iguales a sí mismos...