miércoles, 13 de marzo de 2013



Noche...

... encendiste muy alto las estrellas
y suavemente desciendes a la tierra.
Vienes a prolongar el territorio de mi forma
puedo sentirte maternal, amiga
porque tu mano en la brisa
me acaricia la frente, 
aligera el peso de mis brazos y quiere
compartir la callada agonía de nacerme.

Suavizas el contorno duro de las cosas,
vuelves mansos los fantasmas que aparecen
a contraluz, en los recodos de la mente.
Yo regreso de ausencias. Tú me esperas siempre
con una voz de grillos cortando tu perfil
de luna en creciente.

En el cuenco de mis manos conservo
un día fatigado que entrego
a tu ternura. Mécelo como a mí
en tu regazo profundo
primitivo
vigente.

2 comentarios:

  1. Cuando las palabras van más allá de nuestro pensar, cuando los versos se eslabonan en diademas inusitadas de nuevas luces encuentros y estrategias de un sublime idioma poético, nos acercamos al éxtasis escrito, legado de una gran POETISA ARGENTINA.

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  2. Querida Mirta, cómo acompañan y abrigan tus palabras! por supuesto que me parece enorme tu elogio, yo creo que lo que escribo es simple... hasta que llega alguien como vos y me hace sentir una reina! Pero ni se me ocurre ponerme la corona, sólo quiero que acompañes mis palabras con el arte de tus dibujos. Gracias...

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