martes, 13 de marzo de 2012

Infatigable llama

En la habitación una lámpara oscila,
protege el cuarto con su fuego secreto.
No se fatiga de arder,
su llama enciende y apaga con temblor
rostros amados, en fotografías.

Y alguna alegría desorientada
vuelve a pasar por el corazón...

Alta lámpara, siempre
encendida en mi noche:
cuida que no sea mi cuerpo
delgado hueco sin soles.

Acerca tu calor hasta encontrar
este pulso que persiste en su frío,
desármalo.
Quémalo con tu nocturna luz
matadora de sombras...

No hay comentarios:

Publicar un comentario